Bueno, pues mi bienvenida de nuevo a los madriles ha sido la mar de soprendente a la vez que inolvidable. Esta imagen es lo más parecido a mi día de ayer noche, sólo que en vez de enseñarme el cuchillo así, me lo puesieron en la tripa para robarme todo lo que tenía encima. Pasó en la C/Pez Volador a la altura del metro Estrella, un tio que iba delante mío se metió tras unos containers y cuando llegué a su altura, se me avalanzó agarrándome del brazo y poniéndome un utensilio muy similiar al de la foto en el vientre. No hacía nada más que decirme que me callase y que le diese todo. De modo que así actué. Al verle huir no me podía creer lo que me había acabado de suceder.
Saber que en el momento más inesperado, tu vida pasa a pender de un hilo a decisión de un tio poco cuerdo o con muchos vicios, hace sentirte impotente y con ganas de gritar. ¿Que estará haciendo ahora mismo este tipejo: tirando la jeringa de su dosis diaria a un parque con niños, robando a otra chiquilla... ? en fin, da igual porque la sociedad se lo consiente.
TODOS TENEMOS DERECHOS.
Pobres toxicómanos, pagémosles todos los españolitos de a pie sesiones de réinserción social, mejoras de las condiciones de las cárceles, metadona.... todo esto mientras a tí por haberte robado y haberte pelado el culo, te pueden meter un puro por conducir sin el dichoso carnet que el muy cabrón del kinki te ha mangado, puesto que el papel de la denuncia no sirve para demostrar nada.
Sí señores, estoy orgullosa por pertenecer a un país desarrollado y tolerante
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2 comentarios:
No tengas la menor duda, que en este país siempre habrá una Ley, para dos cosas. Primera no cumplirla, y segunda, para volver hacer otra ley.
Ese arte se llama POLITICA
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!GRACIAS!
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